La mejor actitud ante la morosidad es la de la prevención, ya que resulta la manera más segura de controlar las situaciones que pueden arruinar a las comunidades de vecinos y poner en riesgo la estabilidad del desarrollo de las propuestas, las remodelaciones o la resolución de las derramas. Contar con una estrategia en este sentido será muy tranquilizador para todas las personas y entidades involucradas.
Flujo de información y documentación
Cuanta más información se tenga antes de cerrar una transacción más segura será esta y menos posibilidades de enfrentarnos a la morosidad acabaremos teniendo, ya que a veces, con las prisas, se aprueban ciertas medidas que no todos los vecinos están dispuestos a pagar o capacitados para ello y más adelante podría ser demasiado tarde.
Actuar con la documentación adecuada en todos los casos va a ser crucial para la prevención de la morosidad. El administrador de fincas debe dejar todo por escrito y gestionar una contabilidad detallada para que no se de pie a errores o posibles confusiones y llevar siempre un control sobre las personas que están al día en sus pagos a la comunidad y las que no.
Escoger y dialogar
La prevención de la morosidad también pasa por escoger bien los proyectos y analizar su viabilidad, ya que es posible que nos encontremos con propietarios o vecinos que acaben siendo morosos por una falta de previsión presupuestaria o un mal cálculo de la magnitud de lo que se quiere realizar. Si hay alguna subida del precio de la comunidad también será interesante que se realice de forma estratégica y no en un momento complicado en el que algunas personas puedan tener deudas.
Aunque se trate de comunidades de vecinos pequeñas, es conveniente que se realice un ejercicio de análisis antes de meterse en deudas o en reformas, ya que a veces la confianza puede crear la falta ilusión de que la economía se va a controlar mejor pero esto no es necesariamente así. Nunca se debe dejar de actuar de manera estratégica con las cuentas de los inmuebles y las fincas.
La figura del administrador de fincas y su importancia
Para la prevención de la morosidad en las comunidades de vecinos es fundamental contar con la figura de un administrador de fincas ya que ejercerá de una forma profesional y neutral gestionando las cuentas con la mayor precisión posible. Contar con este profesional ayudará a obtener un mayor rigor en todos los sentidos y un control exhaustivo de la situación, algo que, cuando se gestiona de una forma particular, puede ser mucho más complicado.
El administrador de fincas cuenta con herramientas profesionales que los usuarios no manejan y un interesante bagaje con el que prevenir la morosidad desde un punto de vista imparcial, a veces difícil de conseguir si los propietarios o las vecinos tienen una relación estrecha. En este sentido es vital la gestión profesional de la contabilidad y el seguimiento de cada movimiento que se realiza en las comunidades de vecinos.